
INGREDIENTES
Para las mousses
- 500 ml nata para montar
- 100 g chocolate con leche fondant
- 100 g chocolate blanco fondant
- 100 g chocolate negro fondant
- 500 ml leche
- 3 cda azúcar
- 9 hojas gelatina neutra
Para decorar
- bolitas de chocolate negro
- 2 barritas chocolate con barquillo
- 2 cookies de chocolate
PREPARACIÓN
Dispón la nata, que debe estar muy fría, en un cuenco grande y bátela, con ayuda de unas varillas eléctricas, hasta que esté completamente montada. Resérvala en el frigorífico.
Trocea los chocolates por separado, o rállalos si lo prefieres, y colócalos en 3 cuencos. Vierte la tercera parte de la leche en un cazo, añade 1 cucharada de azúcar y mezcla con una cuchara hasta que el azúcar se disuelva. Lleva a ebullición, cuece unos instantes y retira del fuego. Viértela sobre el chocolate con leche y remueve hasta que se funda completamente.
Deja 3 hojas de gelatina en remojo de agua fría durante 5 minutos para que se hidraten. Escúrrelas muy bien, disuélvelas en unas cucharadas de agua caliente y agrégalas a la crema de chocolate con leche. Incorpora a esta preparación la tercera parte de la nata montada, con movimientos envolventes para que no pierda volumen. Repártela en unos vasitos de cristal y congela 30 minutos.
Repite la operación con el chocolate blanco, cubre con esta crema la de chocolate con leche y congela 30 minutos. Haz lo mismo con el chocolate negro, repártelo sobre la gelatina de chocolate blanco y congela 2 horas. En el último momento, decora con las bolitas de chocolate, las barritas y las cookies troceadas.
El truco: Puedes congelar los vasitos durante más tiempo para servirlos en otra ocasión. En ese caso, retíralos del congelador y déjalos a temperatura ambiente 1 o 2 horas antes de llevarlos a la mesa.